A lo largo de todo este tiempo, los chicos de 1er grado, fueron trabajando las emociones con la seño Sofi y hace algunos días, llegó el momento de cerrar este hermoso proyecto. Como no podía ser de otra manera, qué mejor que terminarlo con la emoción más linda que podemos experimentar: el amor.
Así, la seño Sofi les propuso pintar un corazón y poner en su interior todas las emociones que fueron viendo durante el proyecto.
Estos corazones resumen todo el arduo y maravilloso trabajo que fueron realizando los chicos; sus ganas de estudiar y seguir aprendiendo.
Gracias Sofi por permitirnos compartir esta actividad tan linda y gracias a los chicos por seguir trabajando juntos y enseñarnos que nunca hay que bajar los brazos.
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